domingo, 4 de junio de 2023

Nada nuevo ante Freud : Conductismo 3ra Generación

 

Los Conductistas con su 3ra generación te venden cosas "nuevas", pero repiten procesos que Freud ya elaboró desde 1895. Este ejemplo es de un Conductista que en 2005 (Dymond) se glorifica de su nueva novísima creación:

"Un hombre que es infeliz en su matrimonio puede comentarle a un terapeuta que él está comenzando a experimentar pánico cuando está encerrado en espacios pequeños, como por ejemplo un elevador. El terapeuta puede mostrarle al cliente las relaciones derivadas que se adquieren entre los diversos tipos de trampas que él experimenta.
La primera se relaciona con el sentido no arbitrario del término en el cual los espacios pequeños realmente encierran a un individuo y hacen el escape imposible. La segunda variedad de trampas es de "clase simbólica".
Específicamente, el matrimonio del hombre no lo envuelve físicamente y no previene el movimiento físico. Más bien restringe su comportamiento en un sentido más general (ej., la habilidad de utilizar su tiempo como mejor le parezca).
Mientras la emergencia de una relación derivada entre el matrimonio y un espacio encerrado ayuda al terapeuta a explicar teóricamente la emergencia de respuestas de pánico incondicionadas y nuevas, ésta no sugiere que la relación sea en sí misma completamente arbitraria.
Por ejemplo, los cambios fisiológicos que ocurren cuando se está atrapado en un espacio pequeño comparten muchas propiedades formales con la experiencia subjetiva de sentirse atrapado en un matrimonio (ej., la presión arterial incrementa). En efecto, las características formales comunes de respuesta a la trampa física y el sentido de opresión dentro de un matrimonio pueden facilitar realmente la aparición de relaciones derivadas entre los dos eventos.
En principio una relación derivada entre dos eventos puede emerger completamente de redes relacionales arbitrarias, la relación física entre esos eventos puede participar en la generación de esas redes relaciónales. Por lo tanto, al reconocer la interacción sutil entre los procesos de aprendizaje verbal y no verbal, la TMR puede proporcionar una explicación técnica viable de la emergencia de patrones de conducta altamente complejos y novedosos, que abarca el papel de las propiedades formales del estímulo, de las relaciones derivadas del estímulo y de la trasformación de funciones."

Retengamos que de "relaciones derivadas" puede emularse a "desplazamientos", la "Emergencia de patrones" como formación de compromiso y la "clase simbólica" como "condensación". Aquí nada nuevo bajo el Sol.

Como podrán ver, casos así en la tantísima literatura psicoanalítica abundan por doquier. Pongamos el ejemplo que Freud da en el Hombre de los Lobos, quien “al tener noticia de la muerte de su hermana apenas sintió indicio alguno de dolor. Se compelió a dar muestras de duelo, y con toda frialdad pudo alegrarse de que ahora pasaría a ser el único heredero de la fortuna (…) Era de esperar, desde luego, que el dolor producido por la pérdida de la persona más querida de su familia quedase inhibido en su exteriorización por el efecto continuado de los celos que aquélla le inspiraba (…) Pocos meses después de la muerte de su hermana hizo a su vez un viaje a la comarca donde ella había fallecido, buscó allí la tumba de un gran poeta que era por entonces su ideal y vertió ardientes lágrimas sobre esa tumba.
Fue una reacción extraña para él, pues sabía que habían pasado más de dos generaciones desde la muerte del venerado poeta. Sólo la comprendió al recordar que su padre solía comparar las poesías de la hermana muerta con las de ese gran poeta (…) otro indicio para la concepción recta de ese homenaje en apariencia dirigido al poeta. Antes había señalado repetidas veces que su hermana se había pegado un tiro, y luego se vio obligado a rectificar: había tomado veneno. Era el poeta quien había muerto de un tiro en un duelo a pistola”.

En resumen, el paciente llora por alguien lejano por "relaciones derivadas", de quien las relaciones derivadas se asocian con su hermana. "Emergencia de patrones de conducta" altamente complejos que también coordina el lamentarse a momentos de algo «supuestamente irrelevante» (estímulo poeta) para luego volver a lamentarse por el mismo duelo de su hermana mediante las transformaciones funcionales vía condensación.

Estos no serían casos de plagio, pues estoy 100% seguro que estos conductistas no leyeron a Freud. Solo creen descubrir la pólvora sin leer ningún autor previo por holgazanes.

Con eso de 3ra revolución Conductista, no veo nada nuevo en las ACT que ya elaboraron las TCC desde los 50s. O la TMR con la Teoría de Sistemas desde fines de los 50s.

sábado, 8 de abril de 2023

Sobre el USO o AB-USO del Objeto en Winnicott y Balint

No comparto todas sus premisas, pero el Psicoanálisis Relacional es desafiador, crítico, no deja NADA a lo obvio, te obliga a pensar las incomodidades que surgen en lo clínico, una sed por la autenticidad, evitar el Falso Self del terapeuta, etc.

Sin embargo, hay una noción o concepto clínico que me provoca más distancia, un ruido que no logró converger del todo desde lo Clínico. Me refiero al: "USO DEL OBJETO".

Hay distintas corrientes en Psicoanálisis Relacional que emplean el "uso del objeto" de formas diversas (no niego su teoría y el sentido clínico que puede aportar). Pero algunos, extreman-imitan las Tesis de Winnicott, Balint o Little más desafiantes. Cuyos métodos y fines exigen sobrevivir, extremar la paciencia, forzar la tolerancia, morderse la lengua, ser mártir, mantener compasión, ser omnipotente misericordioso, masoquista moral, madre LITERAL, etc.

De esta versión al "uso del objeto" es solo la que me refiero aquí.
Basándome en el libro "El odio y la clínica psicoanalítica actual (2020). Llamó mi atención varias viñetas clínicas que eran un verdadero vía crucis, soportar con pasión la destructividad e insultos del paciente, aguantar dando la otra mejilla cuando rompen cosas, morderse lengua y labios, etc.

¿Qué pasaría sin quererlo o sin desearlo, provocamos una regresión sádica, una perversión de vínculo que torne adictiva su descarga pulsional para uso de sus frustraciones? ¿Llegaremos así al codiciado puerto por lograr empatizar por el otro? ¿Siempre podemos llegar a tiempo para revertir lo polimorfo pulsional-parcial, solo si permitimos sobrevivir ante la agresión y el desprecio?
¿Dar la otra mejilla hasta que se aburra o deje de abofetearnos? ¿Destetar poco a poco, aunque el pezón ya esté carcomido? ¿Quién pagará el odio es el terapeuta para promover un primer «Don» que el paciente no obtuvo?

Hay que entender que tanto la perversión pulsional-parcial como la adicción no siempre son producidas por una carencia, también se generan por los excesos ilimitados de la pulsión (perversa polimorfa).
En contexto de pacientes graves, fronterizos, invitan a regresionar al paciente para que reviva y re-transite por el odio-destrucción puro sin límite como primera base para dar cuenta de la existencia del objeto como tal.
La voracidad y el sadismo pueden potenciarse más que apagarse. Es un arma de doble filo su apuesta.
Puede ser un viaje sin retorno dejarse dañar con daños irreversibles que al comienzo, subestiman la destructividad o perversión sin empatía

No olvidemos que Freud (1930), tomando en cuenta la historia de la civilización en sus múltiples guerras: “el ser humano no es un ser manso, amable, a lo sumo capaz de defenderse si lo atacan, sino que es lícito atribuir a su dotación pulsional una buena cuota de agresividad. En consecuencia, el prójimo no es solamente un posible auxiliar y objeto sexual, sino una tentación para satisfacer en él la agresión, explotar su fuerza de trabajo sin resarcirlo, usarlo sexualmente sin su consentimiento, desposeerlo de su patrimonio, humillarlo, infligirle dolores, martirizarlo y asesinarlo. ¿quién, en vista de las experiencias de la vida y de la historia, osaría poner en entredicho tal apotegma?”.

¿Repetir «su majestad el bebé» a «su majestad el paciente»?
¿Cómo distinguir la delgadísima línea entre «uso» de objeto y «Ab-uso»?.
Surge la fantasía Omnipotente del terapeuta en que yo lo cambiaré y soportaré lo que deba tener aguantar, soportar, resistir y sobrevivir a su destrucción o agresión. Algún día cambiará, justificando una piedad no merecida como aquellas parejas abusadas que perdonan a sus parejas abusivas una y otra vez con ingenua fé.

Analista pregona un Falso Self frente a su paciente, demostrando omnipotencia sin ser capaz de expresar lo que siente, dejando sin límites a la pulsión destructiva o perversa-sádica.
Que el paciente siga viniendo a sesiones y dando «uso del objeto», no significa que el tratamiento avance, está en medio de un atolladero del cual el terapeuta se refugia en la fantasía que mientras sobreviva, todo marcha como debiese.
El paciente puede notar en su terapeuta lo actoral de seguir la sesión con mínimos límites sin confrontación alguna.

Contrayendo su impotencia contra-transferencial y un miedo a que emerja la contra-transferencia o cualquier verdadero self. Solidifican el Falso Self del terapeuta aunque las sesiones sigan manteniendo la esperanza que soportando y sobreviviendo por más tiempo, masoquistamente tolerando se llegaría a destino por esta vía y por ninguna otra posible.
¿Debemos irremediablemente ofrecernos como la madre suficientemente buena que no tuvo, para así reparar sus fallas ambientales, sobreviviendo a las pataletas o berrinches del paciente en sesiones?
¿Nos basta solamente con tener en cuenta que el paciente merece misericordia, piedad dada la infancia dolorosa que tuvo sin sostén? ¿No cabe más que aguantar nuestra contra-transferencia culpabilizándonos que buena parte de nuestro malestar es producto solo de falta de auto-análisis?

Por último, la diferencia clínica entre «regresión benigna» y «regresión maligna» de M. Balint, suena razonable en lo teórico, pero como apuesta clínica presenta una serie de encrucijadas en riesgos, las cuales ya anteriormente presentamos.
Algunos apostarán en detectar cuándo el paciente estaría en modo regresivo «benigno» o en modo «maligno», sin embargo, la línea es MUY difusa en distinguir. No es tan sencillo polarizar «benigno» como pena-soledad y «maligno» como destrucción-adicción.
Como suele suceder, se dan ambas en diversas mixturas y dinámicas no posibles de separar tajantemente.

De nuevo, no todo Psicoanálisis Relacional o Intersubjetivo opera del mismo modo, pero estos casos revelan más la piedad, compasión, misericordia y masoquismo del terapeuta. Los cuales difiero en que se conviertan en un Imperativo Categórico Universal en lo clínico en su exigencia.
No se trata que el terapeuta no tolere contra-transferencia alguna o que no se guarde algo de su intimidad para dar libertad al paciente a expresarse, esperando consigo alguna transformación.
Pero no podemos volver omnipotente nuestra posición como clínico, aparentando que atolladeros así se resuelve con más sumisión y paciencia. Pues el paciente que pacientemente espera termina siendo el terapeuta y no el paciente.

Volviendo a las OTRAS corrientes del Psicoanálisis, algunas para salir del atolladero promueven otros métodos como la autodevelación al otro para que logre empatizar con el daño infringido, otros interpretan inmediatamente la transferencia sucedida, otros confrontan desde su contra-transferencia, destetar gradualmente, etc.
No pretendo dar "LA" respuesta sobre cómo o cuándo qué hacer, pero al menos busco discutir la noción de USO o AB-USO del objeto en lo clínico.

Pd: Esto lo escribí en el contexto para clinica adulto.
En clinica para bebés o niños en primera infancia (lugar donde Winnicott es el maestro de maestros), allí creo que la dinámica invita a tomar esto desde otras veredas clinicas y son legítimas en plantear

Pd2: Añado aquí los comentarios por parte de los dos Editores del Libro "El odio y la clínica psicoanalítica actual (2020). Tuvo el honor de recibir mención:

- Carmen Gloria Fenieux Campos
Hola Diego,.
Muchísimas gracias por leer nuestro libro y plantear la discusión acerca del uso y la sobrevivencia del objeto.
Indudablemente a veces como analistas nos vemos atrapados y contraactuando , incluso iatrogénicamente cómo planteas, aspectos sadomasoquista que se actualizan en nosotros con el paciente.
La permanencia repetitiva en ello y sin elaboración, de ninguna manera contribuye al desarrollo del proceso,.ni menos al crecimiento del paciente. Además de los importantes costos emocionales para el analista.
Pienso que nunca es fácil, pero sin lugar a dudas cuestionarse el límite, hacer el trabajo de elaboración en el espacio analítico, plantear paramétros y en algunos casos tomar decisiones tales como la derivación por ejemplo son formas de sobrevivencia del analista saludables y a veces totalmente necesarias para el proceso. Cuándo? cómo? en qué momento?. eso es algo que sólo sabemos o conocemos a través de la contratransferencia de manera sutil y compleja a la vez.

- Rodrigo Rojas Jerez
Hola Diego! Primero mis disculpas por el largo paso del tiempo!
Muy interesante tu observación y comentario. Sobre todo comparto del riesgo del masoquismo o de la omnipotencia como analistas. Bueno es obvio que esto queda en manos del propio análisis de cada uno. Pero me parece que en términos metapsicológicos Winnicott nos previene y señala con claridad el necesario análisis de dichos elementos masoquistas, pero además señala con claridad el necesario odio objetivo del analista. No sólo en su art sobre el odio en la Contratransferencia, sino que también en el mismo del Uso del Objeto. Es interesante este punto porque es en las adendas publicadas con posterioridad que Winnicott destaca el rol del padre, como tercero frente a la constitución psíquica del bebé, así como también como al lugar dentro lo que sería la integración frente a la propia escisión.
En fin es una discusión realmente fundamental y central para cualquiera que desee investigar en estos modos del psicoanálisis. No sólo puede ocurrir lo que señalas, sino que también muchas veces ocurre algo desde lo social en relación a lo winnicottiano cuando uno escucha, Winnicott es tan optimista (literalmente me quedo plop) o cuando por ser alguien winnicottiano, prácticamente tendría que trabajar gratis o no tener la libertad de cobrar y definir sus propios honorarios.
Como te digo agradezco tu lectura y comentario. Slds

lunes, 27 de marzo de 2023

Sujeto NO sujetado al tiempo ni al espacio (tiempo y espacio en Lacan)

-          Tiempo en “Clínica” Lacaniana

El Tiempo de sesión en Lacan estaría purificada, formalizada, en castillos en el aire idealista de lo "Lógico". Con dicha palabra todo vale para trascender el mundo mortal del tiempo y espacio.

Ahora el tiempo es tiempo "Lógico", los cortes, actings de psicodrama perpetrado por el "analista" son válidos por la justificación o comodín de ser algo "Lógico".

 ¿Pero de qué lógica se trata para validarlo como lógico?

Nuevamente, calzando otro ad hoc comodín, el llamado no-todo, hiancia, falta, vacío, intervalo, etc.

 ¿Pero qué relación guarda esto último con la lógica misma? ¿Cuál de las lógicas justificaría el Corte conductista de reforzamiento negativo por sesión "lógica" variable?

Vetar lo Crono de la lógica. El enemigo de Lacan es la Crono-logía quien mantiene el Sentido, historia y diacronía: Elementos rechazados por la caprichosa lógica elegida de Lacan.

 

Pero ahora, entonces: ¿Qué lógica es la lógica sin "cronos" y sin sentido?

Queda el sin-sentido, la lógica misma de lo Real en cuanto Real.

¿Real? ¿Lógica Real y sin tiempo a-cronológico o de mágica tyché-acontecimiento-vacío? Esta es caprichosa lógica que Lacan remite para la "lógica del sujeto inconsciente".

Pero sujeto NO sujetado al tiempo-espacio, no!!. Sino a la Falta, a su afánisis desfalleciente, intervalo, la hiancia. Vale decir, su sin sentido, fuera del campo fenomenológico de tiempo-espacio.

 

¿Pero qué relación tiene esto con el corte de sesión o las sesiones breves?

Apuntar al único timón "Real" que nos direcciona a lo Real: Escandir los significantes que apresan al sujeto, apuntar a lo descompletado perpetuo de un significante que remite a un sujeto para otro significante. Esperar sin ceder a la Demanda del analizante para que emerja el significante aislado, el acontecimiento-intervalo de la nada-en-sí-pura REAL.

 ¿Dónde está la lógica? En la opaciead, a-semantica, el no-todo, la incompletitud, sin-sentido, el Otro-barrado, etc. De las cuales, ninguna de ellas es "Crono-lógica".

Es decir, re-teatralizar en sesiones lo -1, lo ausente, la falta, lo barrado, la pérdida, etc. Re-castrar lo que aún no ha sido suficientemente castrado. Dirección de la "Cura" a través de formalizar la lógica de lo inconsciente, en cuanto sujeto-ahuecado-barrado entre la serie de "significantes" que podría como imán, en algún momento "lógico", CORTAR, GOLPEAR, ESCANDIR, psicodramatizar, TOCANDO lo "REAL" místico o "intervalo" new age.

 

-          Espacio en la “Clínica” Lacaniana

El $ujeto-barrado de Lacan no está sujetado ni al tiempo ni sujeto al espacio, se le despellejan sus coordenadas. Flotando al vacío Lacan destruye al sujeto como ahuecado o faltante a sí.

La clínica como tiempo "lógico" es sin diacronía, sin cronos, sin tiempo más que el a-histórico de su vacío, pérdida estructural y "afánasis desfalleciente" mística. Su lógica anti-cronológica, desmembra al sujeto sujetado al tiempo, además lo desancla del espacio. Envolviéndolo en una re-teatralización de performance dadaísta que apunte al "corte de sesión y la escansión del significante reductor".

$ujeto sin coordenadas del espacio en cuanto fuera del plano en la habitación o espacio clínico. Las intervenciones exceden el espacio de encuentro, lo traslada dadaistamente al gritar por la ventanas palabras sueltas tipo Koan Budista bajo enigmas, dar portazos, intervenir antes de atender frente a pacientes en espera o ni siquiera los deja entrar, en un mismo espacio mantiene supervisión y pacientes diferentes en el mismo lugar. Cuenta dinero mientras "escucha" al paciente. Roudinesco (1986) aclara que Lacan: "Juega con las más extremas posturas del tiempo, el espacio y el objeto. Así, por ejemplo, es capaz de tomar en análisis a un paciente que sigue un trabajo de diván con otro terapeuta u otro paciente de quien controla la práctica en relación a un caso cuya práctica también supervisa simultáneamente. Hace variar hasta el infinito la duración de las sesiones y su espaciamiento en el tiempo: de un minuto a una hora o de una sesión por semana a diez por día. Hay que hacer mover al analizando del sillón al diván y luego de una pieza a la otra (...) Podía hablar sentado o incluso de pie. Cuando estaba en su escritorio, Lacan me daba la espalda y leía, escribía, cosía fajos de billetes con grapas o hacía nudos borromeanos (...) No se sienta en el sillón, camina arriba y abajo, da la espalda al paciente, come, bebe y ríe a la vez que presta una fabulosa escucha a ciertos significantes" (p.53-55)

Para colmo, corrompe todo espacio al intervenir con sus mismos Seminarios, lanzando palabras para pacientes-oyentes, en medio de su secta los pacientes se agalopan a sus tribunas esperando la continuación de su tratamiento por alguna mención sugestiva hipnótica ante el auditorio. Todo en uno al mismo espacio que Lacan corrompe.

M. Mannoni (1985) en el Posfacio de Patrick Guyomard, explica: «Para muchos de sus analizados, la práctica de Lacan era inseparable de su enseñanza. Era posible a veces tener una o varias sesiones el mismo día o venir todos los días (...) Además se operaba una especie de intercambio entre el seminario y análisis. Si el analizado esperaba una palabra o una interpretación más que una respuesta, solía buscarlas en el seminario. De ahí la ilusión de que Lacan le hablaba a título personal y la función interpretativa o analizante del seminario. Función que no es de sorprender, ya que emanaba de la necesidad, seguramente vital para Lacan, de decir en un lugar y ante un analista representado por el auditorio, algo que según él sólo podía ser elaborado si era dicho en esas condiciones». Reiterando lo mismo, en cita al márgen (n.48): "Parece indudable que Lacan encontraba ocasión de analizar dando seminarios más que escribiendo."

Después de todo, según Ch. Melman (2002): “en esta interlocución, no hay intersubjetividad. No es un sujeto que se dirige a otros sujetos, es un sujeto que encuentra su lugar oculto, su recinto, su virtualidad en el déficit, en el agujero, en la falta que nos reúne". De la misma manera reitera Anasagasti: "al confrontar al ser hablante con un agujero, un vacío, un espacio en blanco en la cadena del significante, le sitúa, de forma traumática, ante el riesgo de su desaparición, de su afánisis como sujeto (p.108)".

Y como no podía ser de otra forma, como siempre Lacan (1954) inventa cosas sobre Freud que NUNCA dijo: "escuchando a Freud hoy, que es la hiancia de un vacío la que constituye el primer paso de todo su movimiento dialéctico" (p.373)."

Leclaire (1972) en Argentina: «Nosotros no pensamos que la transferencia sea la presencia de sentimientos reales. Nosotros consideramos como transferencia lo que se despliega en el campo de nuestra no-respuesta al deseo del paciente. (...) Nosotros no respondemos como persona humana (...) para no tener necesidad de recurrir a esta especie de ambiente sentimental. El sentimiento, por definición, es la confusión». R. Bernardi (2010) - El psicoanálisis en Latinoamérica.

Ya todo se justifica por el derrumbe del espacio-tiempo en su vacío-hiancia-agujero-falta, etc. Como ya mencionó Lacan desde 1953, carcomer el campo imaginario para operar más limpiamente con la "juntura" formalista simbólico-real, como pura reducción mística fenomenológica (epojé) desprendida: "la abstención del analista, su negativa a responder, es un elemento de la realidad en el análisis. Más exactamente, es en esa negatividad en cuanto que es pura, es decir, desprendida de todo motivo particular, donde reside la juntura entre lo simbólico y lo real” (p.297)."

No negamos que podemos intervenir con algún mail, mensaje, llamada o desde recintos comunitarios-residenciales, pero son siempre bajo consentimiento, un mínimo acuerdo tiempo-espacial entre las partes sin invadir y sugestionar dadaísta. El sujeto sujetado al tiempo-espacio es ético y debemos respetarlo en su categoría kantiana básica.

 

-          Conclusión

Obviamente no existe espacio sin tiempo o al revés: Al expulsar-cortar sesión al paciente lo aborta del íntimo espacio clínico y lo margina del tiempo. Con recortar letritas nos bastaría, con apuntar a lo real sería "dirección de la cura".

¿Y si el paciente se suicida por dicha Dirección? No es culpa tuya... no cediste a tu deseo, seguiste el rigor lógico formal de Lacan, pregúntenle a Lucien Sebag... No caigamos en "Imaginarios" éticos...

 Lacan interviene su "clínica" pulverizando la fenomenología del tiempo y espacio. Destruye las coordenadas a priori de Kant produciendo su dadaísmo performativo en su Clínica.

 En resumen, expulsas tiempo-espacio con libertinaje pleno a la atrocidad y faltas de ética. Para Lacan y Lacanianos "eso es puro imaginario", "la emoción es mero imaginario", "no ceder a la Demanda", etc. Pues no! la emoción de asco, rabia es lo que nos cruje moralmente (no es imaginario al viento), no basta con justificar a Lacan con que en análisis todo está permitido en El Nombre de la Lógica "a-temporal" y "a-espacial" como pregona la secta new age de Apola con Eidelsztein.

¿Pero cómo yo sé qué lógica hizo de Real para ese "Fin de análisis"? Pues bueno... que PASE el siguiente PASE piramidal de secta que se los explique; pague su matrícula para escalar en membresía y PASE a "trascender el mundo mortal del tiempo y el espacio"... (repita la "lógica" hasta que pague en Escuela).

martes, 21 de marzo de 2023

El Yo y el Ello (1923) Mitos y exageraciones

 

Se tiene la creencia a 100 años que dicho texto habría cambiado radicalmente algunas cosas de Freud o que marcó mayor prioridad al Yo como instancia. Añadiendo supuestamente un cambio innovador con el "Ello" o sacó a la luz algo supuestamente nuevo con el "Super-Yo".
 
En rigor, leyendo y teniendo en cuenta Completa la Obra de Freud, tales elementos ya estaban plasmados y otros básicamente construidos pero sin un léxico formal más concreto. Básicamente, Freud reordena, distingue algunas cosas, pero no innovó ni creó algo novedoso previo con sus textos anteriores.
 
Se han edificado muchos extravíos (Lacan principalmente) de lectura en que Freud dió más prioridad al Yo, cuestión falsa pues ignoran lo que Freud trabajó del Yo durante 1892 a 1896, lo que Freud detalló entre 1912 a 1914, lo fundamental del yo en 1915 y lo que formuló en 1917 a 1921.
Ahora bien, algo que SI SE PODRÍA criticar a su texto, NO ES la cuestión del Yo y menos sobre lo que ya repitió de nuevo sobre la Melancolía (sombra) en YO.
 
Lo que critico del texto EL Yo y el Ello (1923) es que Freud habiendo ESPECULADO Y CONJETURADO por 1920 sobre algunas formulaciones de la Pulsión de muerte a modo de meras hipótesis sin valor serio (endogenista, simplificador de complejidades). En dicho texto de 1923, trabaja las partes más radicales con seriedad especulativa y arrojando teorías precipitadas sobre el masoquismo.
No obstante, como si nada, en 1926 Freud trabaja su teoría SIN la pulsión de muerte, como si nunca la hubiera abordado, pero luego en 1930 y sobretodo en 1937 vuelve a la carga con sus especulaciones desbordadas.
 
ACLARO que ALGUNAS dimensiones de la pulsión de muerte son fructíferas (lo que ya por 1912 y 1914 abordó sobre la compulsión), lo no ligado (ya trabajado en 1892). Pero hay otras dimensiones de la pulsión de muerte que son absurdas y ridículas. A tal punto que Ferenczi, Reik, Reich, etc, le criticaron a Freud por lo mismo.

viernes, 17 de marzo de 2023

Corte Sesión anti Crono-lógica

El Tiempo de sesión en Lacan estaría purificada, formalizada, en castillos en el aire idealista de lo "Lógico". Con dicha palabra todo vale para trascender el mundo mortal del tiempo y espacio.

Ahora el tiempo es tiempo "Lógico", los cortes, actings de psicodrama perpetrado por el "analista" son válidos por la justificación o comodín de ser algo "Lógico".
 
¿Pero de qué lógica se trata para validarlo como lógico?
Nuevamente, calzando otro ad hoc comodín, el llamado no-todo, hiancia, falta, vacío, intervalo, etc.
¿Pero qué relación guarda esto último con la lógica misma? ¿Cuál de las lógicas justificaría el Corte conductista de reforzamiento negativo por sesión "lógica" variable.
Vetar lo Crono de la lógica. El enemigo de Lacan es la Crono-logía quien mantiene el Sentido, historia y diacronía: Elementos rechazados por la caprichosa lógica elegida de Lacan.
 
Pero ahora, entonces: ¿Qué lógica es la lógica sin "cronos" y sin sentido?
Queda el sin-sentido, la lógica misma de lo Real en cuanto Real.
¿Real? ¿Lógica Real y sin tiempo a-cronológico o de mágica tyché-acontecimiento-vacío? Esta es caprichosa lógica que Lacan remite para la "lógica del sujeto inconsciente".
Pero sujeto NO sujetado al tiempo-espacio, no!!. Sino a su falta, a su afánisis desfalleciente, intervalo, la hiancia. Vale decir, su sin sentido, fuera del campo fenomenológico de tiempo-espacio.
 
¿Pero que relación tiene esto con el corte de sesión o las sesiones breves?
Apuntar al único timón "Real" que nos direcciona a lo Real: Escandir los significantes que apresan al sujeto, apuntar a lo descompletado perpetuo de un significante que remite a un sujeto para otro significante. Esperar sin ceder a la Demanda del analizante a que emerja el significante aislado, el acontecimiento de la nada-en-sí-pura REAL.
¿Donde está la lógica? En la opaciead, a-semantica, el no-todo, la incompletitud, sin-sentido, el Otro-barrado, etc. De las cuales, ninguna de ellas es "Crono-lógica".
 
Es decir, re-teatralizar en sesiones lo -1, lo ausente, la falta, lo barrado, la pérdida, etc. Re-castrar lo que aún no ha sido suficientemente castrado. Dirección de la "Cura" a través de formalizar la lógica de lo inconsciente, en cuanto sujeto-ahuecado-barrado entre la serie de "significantes" que podría como imán, en algún momento "lógico", CORTAR, GOLPEAR, ESCANDIR, psicodramatizar, TOCANDO lo "REAL" místico o "intervalo" new age.
 
¿Pero cómo yo sé qué lógica hizo de Real para ese "Fin de análisis"? Pues bueno... que PASE el siguiente PASE piramidal de secta que se los explique; pague su matricula para escalar en membresía y PASE a "trascender el mundo mortal del tiempo y el espacio"... (repita la "lógica" hasta que pague en Escuela)
Pd: ¿Y si el paciente se suicida por dicha Dirección? No es culpa tuya... no cediste a tu deseo, seguiste el rigor lógico formal de Lacan, pregúntenle a Lucien Sebag... No caigamos en "Imaginarios" éticos...

lunes, 27 de febrero de 2023

Primeros Análisis Mutuos

El análisis mutuo no fue diseñado por Ferenczi, primariamente fue realizado entre C. Jung y Otto Gross en 1908.
Jung mismo le escribió a Freud en Mayo de 1908 sobre lo fecundo que resultaba tal experimento en sus beneficios. Según podemos apreciar, Freud allí no se oponía firmemente aquello.
 
Jung comparó a Gross como un hermano gemelo. Esto último me recuerda a lo que espléndidamente Bion trabajó sobre las fantasías narcisistas de tener un igual-gemelo con quién compartir (vivencia que deja a la mayoría de los mellizos y gemelos como algo inexplicable en vínculo).
 
No obstante, Gross sufría adicciones a drogas y según Jung "demencia precroz", añadiendo Jung que Gross era "incurable". Finalmente el análisis mutuo no terminó de la mejor forma.
 
Lo irónico e hipócrita de todo esto es lo que Ferenczi le decía a Freud en Diciembre 1912 sobre dicho análisis mutuo de Jung y Gross: "El análisis mutuo no tiene sentido y es la vez imposible". Cuestión que años más tarde, el mismo Ferenczi en su diario clínico anotaba sus decepciones y complejas experiencias con sus análisis mutuos, que según algunos, le trajo más sombras que luces en su momento solitario de experimentación.

miércoles, 14 de diciembre de 2022

¿Winnicott cercano a Nietzsche?

Nietzsche sería el último filósofo por quien pensaría algún contacto cercano a Winnicott. No obstante, este párrafo de Winnicott (1969) sobre el Resentimiento. Llamó mi atención sinceramente:
 
"hay dos posiciones extremas: la de los que tienen la posibilidad de autorrealizarse y la de los que, a causa de fallas en las etapas tempranas, no pueden hacerlo. Nada tiene de sorprendente que los segundos se sientan agraviados por la existencia de los primeros. Los desdichados tratarán de destruir su felicidad. Los que son prisioneros de sus rígidas defensas tratarán de destruir la libertad. Los que no pueden disfrutar plenamente de su cuerpo tratarán de impedir el disfrute del cuerpo a los demás, incluso a sus propios hijos, a quienes aman. Los que no pueden amar tratarán de destruir la sencillez de una relación natural por medio del cinismo. Y, desde la otra orilla, los que están demasiado enfermos para vengarse y pasan su vida en hospitales psiquiátricos harán que los que están sanos se sientan culpables de estarlo y de gozar de la libertad de vivir en sociedad y de tomar parte en la política local o mundial.
Hay muchos modos de describir lo que estoy tratando de destacar: que la libertad misma pone en peligro a la libertad. Los que son lo bastante sanos y libres deben ser capaces de tolerar el triunfo que implica su estado" (Winnicott, 1969).